¿Por qué limpiar muebles de madera sin químicos?
La limpieza es clave para mantener y mejorar la condición del hogar, tanto a nivel de habitabilidad diaria, como de mantenimiento a largo plazo. Es por esto que es importante asegurar que el proceso de limpiar muebles y otros artículos no los dañe con el paso del tiempo.
Una buena solución a este problema es utilizar métodos y productos que no impliquen, dentro de lo posible, agentes químicos, pero que igualmente desinfecten y cumplan correctamente su función.
Además, al cambiar los productos de limpieza típicos del supermercado o grandes multinacionales, y limpiar muebles de madera sin químicos, se aumenta la posibilidad de conseguir aromas que resulten más únicos y especiales, naturales, y tolerables para personas alérgicas o sensibles a ciertos olores.
Un añadido es, que así se favorece al medio ambiente. Si en lugar de comprar con cierta asiduidad productos que se venden envasados en plástico, y en su lugar se preparan productos de limpieza caseros, más ecológicos y económicos.
Cuidado diario
Antes de tratar el tema de la limpieza en profundidad, es bueno repasar los básicos del cuidado diario de los muebles.
El uso de mantelerías y textiles de calidad protegerán las superficies, especialmente si son porosas, como las de madera natural, de las posibles manchas que se puedan general en un descuido.
Así mismo, siempre será buena idea tener a mano conjuntos de posavasos, algún individual y un segundo set de vestir la mesa, para que siempre haya uno disponible.
Si aun con las precauciones básicas se da alguna mancha que pueda teñir el mueble, una actuación rápida será la mejor solución: Un trapo con un tejido que no se deshilache fácilmente, bien humedecido. Y en casos más graves, con añadir un poco de jabón neutro bastará.
Es importante recordar que la madera húmeda puede traer problemas al mueble, por lo que se recomienda que siempre se vuelva a pasar un trapo seco para volver a dejar todo como estaba.
Una salida inteligente si no se tienen trapos disponibles en la casa, es reciclar textiles que se hayan quedado viejos, en desuso, o que parte de ellos se encuentre en mal estado para otro tipo de utilidad. Preferiblemente, estos trapos se deberían hacer con prendas que no hayan sido teñidas de forma artificial, y que sean resistentes a la fricción sin deshacerse.
¿Qué es el jabón neutro?
Por definición, el jabón neutro es aquel que tiene un pH de 7, que sería la mitad de la tabla de pH.
Hay que tener cuidado a la hora de buscar uno que realmente sea neutro, y mirar su composición, ya que la mayoría de los jabones que se venden bajo la etiqueta de neutros, suelen tener un PH de 5,5.
Si además de asegurarse de que el jabón que se usa es realmente neutro, se quiere reciclar y reducir el nivel de deshechos que se produce, una buena opción puede ser la de hacer el jabón neutro en casa, con esencias, aceite reciclado y sosa cáustica, o preferiblemente, glicerina neutra.
Limpieza puntual
Cuando se trata del día de limpieza semanal, el proceso pasa a ser algo diferente. Estas son las ocasiones en las que más se acude a agentes químicos, pero no son tan difíciles de evitar como pueda parecer.
Antes de nada, el primer paso siempre es retirar el polvo que se haya asentado a lo largo de la semana con un trapo en seco, luego en húmedo, y luego se vuelve a secar.
El siguiente punto del proceso, será hacer un jabón más intenso que con el que se trabajaba en el cuidado diario, que siga sin dañar el mueble. Para esto, se tomará un cubo con una pequeña proporción de agua, dos medidas algo más grandes de vinagre o zumo de limón y aceite, y otra parte pequeña del jabón neutro.
Con esta solución, se empapa una esponja y se pasa por la superficie haciendo movimientos circulares con suavidad. La esponja debe ser de fibras suaves.
Con este paso se habrá eliminado el polvo restante, la grasa y otros restos que pudieran estar presentes en la madera.
Para evitar que se queden restos del producto que se acaba de aplicar, se volverá a pasar un trapo húmedo, dejándolo secar luego por treinta minutos.
En casos de manchas persistentes, o posibles elementos pegados difíciles de quitar, se aconsejaría el uso de una lija muy fina, y con cuidado, sobre la mancha, siempre con movimientos en la misma dirección que la veta de la madera, para después proceder a una limpieza profunda con jabón neutro.
Con el paso del tiempo
Si lo que se busca es mantener el color natural y original de la madera teca, que puede ir cambiando con el paso de los años, se recomienda nutrir los muebles con aceite de teca, previo realizar una limpieza bien profunda y asegurarse de que se han secado correctamente.
La madera de teca con la que se trabaja en Dareels es de alta calidad y resistencia, pero siempre se recomienda el mejor uso y mantenimiento para poder alargar aun más el tiempo de vida en las mejores condiciones para todas las piezas.